Me Convertí En Un Genio Del Destello en La Academia De Magia

 

Capítulo 50.2

***

 

Todos habían llegado a la conclusión unánime de que ella había robado el papel.

—Ah...—

Alterisha se mordió el labio con fuerza.

Sí, había considerado la posibilidad de que el profesor Maizen pudiera llegar tan lejos.

Pero ahora que la situación se estaba desarrollando, no tenía idea de qué hacer o cómo manejarla. Su mente se quedó en blanco, y sus manos y pies temblaban incontrolablemente.

Encontrarse con la mirada de Maizen fue increíblemente frío. Todo el tormento y la violencia que había soportado por parte de él se había convertido en una experiencia traumática que se adhería a Alterisha como un perfume.

—Q-qué debo hacer...—

En ese momento, su instinto la llevó a mirar a Baek Yu-Seol, como si fuera un niño que busca a su madre.

[Cuando te sientas abrumado y no puedas manejarlo solo, llámame.]

Dijo eso, convenciéndola de que creyera en él. Pero incluso con Baek Yu-Seol, ¿realmente podría haber una forma de salvar esta situación?

Ella no sabía

No lo sabía, pero en este momento, quería confiar en alguien... cualquiera.

Entonces, cerró los ojos con fuerza y ​​levantó la mano.

El moderador percibió la urgencia en los ojos de Beaurock Stoneforge y asintió en respuesta.

Rápidamente, el moderador preguntó: —Sí, ¿qué te gustaría decir?—

—Yo también... quiero llamar a... alguien para que me ayude—.

—¿Ayude? ¿Puedo preguntar quién es?—

¿Qué debería explicar? Alterisha tenía una razón muy válida para referirse a él de esta manera.

—Él es... el "coautor" de este artículo—.

—Eh.—

—Oh,vaya—

Afirmar ser coautor de un artículo que ella había plagiado...

La risa estalló.

Baek Yu-Seol también se sorprendió. "Espera, ¿soy coautor...?"

Nunca hubo ninguna discusión sobre eso.

Beaurock Stoneforge accedió fríamente a su petición.

—¡Está bien! Tráelo—.

Finalmente, Baek Yu-Seol se levantó de su asiento y subió a la plataforma, lo que provocó que los alquimistas fruncieran el ceño.

—¿Un estudiante?—

—No importa cuán talentoso sea...—

—No vinimos aquí para presenciar el juego de un niño, ¿de qué se trata esto?—

Alterisha tembló ante las quejas y el descontento de los alquimistas. Su apariencia era lamentable, pero Baek Yu-Seol no se acercó a ella de inmediato.

Tomando deliberadamente un camino indirecto, sutilmente recuperó algo escondido dentro de su manga y casualmente lo rozó contra el antebrazo de Maizen mientras pasaba.

—... Sin resentimientos.—

Maizen gritó con disgusto, y un mensaje apareció simultáneamente en su mente.

[Se ha activado la habilidad especial "Resentimiento" del artefacto "Rama Venganza".]

[Objetivo del resentimiento: Maizen Tyren]

—Bien. Muy bien.—

Cuán ansiosamente había buscado oportunidades para infligir resentimiento, y finalmente logró su objetivo.

Entonces, Baek Yu-Seol se acercó a Alterisha.

—¿Estás bien?—

—Oh, sí...—

Las miradas de los alquimistas todavía se sentían agudas. Sin embargo, cuando Baek Yu-Seol le dio unas palmaditas en el hombro, su corazón se estabilizó rápidamente.

Levantando lentamente la cabeza, lo miró a la cara. Permaneció tranquilo y sereno, como si hubiera anticipado esta situación.

Baek Yu-Seol recibió el micrófono.

—Profesor Maizen, mucho tiempo sin vernos—.

Maizen contorsionó visiblemente su expresión, pero pronto apareció una sonrisa. Se dio cuenta de que podía derribar a las dos personas que más despreciaba de un solo golpe.

—Primero, profesor, sus argumentos parecían bastante plausibles—.

—... ¿Plausible?—

—Sí. ¿Pero no crees que no hay evidencia decisiva?—

—Bueno, eso se revelará tan pronto como presente públicamente mi estimado trabajo. Y yo, también, siempre llevo conmigo el trabajo sobre la Fórmula de Aumento Delta—.

—¿Es así? Bueno, eso funciona bien entonces—, dijo Baek Yu-Seol con una sonrisa, revelando sus dientes blancos.

Maizen sin querer dio un paso atrás.

—¿Qué está sucediendo…?—

Era una sonrisa que había visto innumerables veces antes. Y cada vez que aparecía esa sonrisa, siempre había sido derrotado por ella.

"No no. ¡No esta vez!"

Después de mirar brevemente a Beaurock Stoneforge, Baek Yu-Seol se volvió hacia Maizen y dijo: —Está bien. ¿Qué tal si lo resolvemos aquí mismo, cada uno por su cuenta? Los cinco acertijos que permanecieron sin resolver durante 300 años—.

—Descubrir si nuestra solución coincide con la suya, profesor, o no. Es bastante simple, ¿no?—

Resolver el problema era el método más fácil, directo y claro.

—Bueno... entonces podemos determinar de quién es la respuesta correcta, ¿verdad?—

Maizen se mordió los labios con fuerza, ligeramente sorprendido por la actitud segura de sí mismo de Baek Yu-Seol.

"¿Qué es esto? ¿Podría ser que haya una trampa...?"

Esto era problemático.

Meizen hizo todo lo posible para poner excusas y calmar esta confrontación.

—Perder el tiempo con trucos innecesarios—

—Espera un momento.—

Sin embargo, antes de que sus palabras pudieran llegar a una conclusión, fueron interrumpidos por Stoneforge.

—Un enfrentamiento entre el profesor y el asistente de enseñanza sobre la interpretación del trabajo...—

Fingió contemplar por un momento, luego estalló en una carcajada, típica de un enano.

—¡Suena muy interesante!—

Una clara señal de aprobación.

Baek Yu-Seol, que había ido tan lejos, se volvió hacia Alterisha.

—Yo, yo...—

—Asistente Alterisha. Tú puedes hacerlo. Confío en ti más que en nadie—.

"El niño... Todavía está sonriendo."

"¿Porque eso?"

Con un acto tan trivial, la confianza brotó en el corazón de Alterisha.

Baek Yu Seol.

Entre los estudiantes, se le llamaba en broma el "archienemigo del profesor Maizen".

Fue debido a su talento sobresaliente que siempre fue perseguido, pero siempre salió victorioso y le hizo pasar un mal rato a Maizen.

Era satisfactorio.

Se sintió refrescante.

Al ser mucho más joven que él, Alterisha admiró cómo se enfrentó audazmente al profesor Maizen, a quien no podía atreverse a tratar a la ligera.

"¿Puedo hacerlo yo también?"

Tomando una respiración profunda, llenó sus pulmones de oxígeno, como si intentara reunir confianza en su corazón temeroso.

—El profesor y yo, sin duda, hemos realizado investigaciones diferentes—.

En el mundo había numerosas soluciones para una sola fórmula. Era la belleza de la alquimia.

—En ese caso, la solución del profesor y la mía deben ser completamente diferentes—.

Mantuvo la cabeza en alto, no dispuesta a mostrar una ligera debilidad frente a Maizen. Luego, se quitó los anteojos y desató la desordenada banda para el cabello que siempre había guardado.

—Oh...—

Con solo quitar dos accesorios, su impresión cambió en un instante, y Beaurock Stoneforge no pudo evitar lanzar una exclamación de admiración.

—¡Ja!—

Exhalando profundamente, Alterisha reveló su sonrisa prístina, mostrando sus dientes blancos como perlas.

Eso fue... una sonrisa de un verdadero genio, lleno de confianza. Una sonrisa que el profesor Maizen Tyren nunca había visto en ella como su asistente.

—Profesor Maizen, ¿empezamos?—

 

***

 

Traductora: Lizzielenka